martes, 8 de septiembre de 2009

Mi linda princesa

Llegaste a nuestras vidas
y tu nombre fue Rocío,
para llenar de calor
aquel invierno tan frío.

Si algo me sorprendió
fue tu dulce belleza,
y mi corazón susurró
nació mi linda princesa.

Tus manitos delicadas
y tu piel de fina seda,
robaban ilusionadas
todo el amor que me queda.

Nunca pensé que seria
tan feliz y afortunado,
que la vida me daría
tanta belleza a mi lado.

Hoy como padre te digo
que tienes todo mi amor,
no te faltara cariño
y sentirás mi calor.

Adrián Correa
08/09/2009

jueves, 9 de julio de 2009

Realmente me arrepiento

De pocas cosas en mi vida
realmente me arrepiento,
pero esta fue muy sentida
y por tiempo un tormento.

Mis días pasaban tranquilos
hasta aquel de tu llegada,
nunca imagine sentir los filos
de tu traicionera puñalada.

En parte yo fui culpable
de sin pensarlo aceptar,
tu propuesta irrechazable
que caro me harías pagar.

Me entregue en cuerpo y alma
a una noche de pasión,
pero al recuperar la calma
me enfrente con mi traición.

Por caer en tu emboscada
perdí todo lo que quería,
pues mi mujer me aclaraba
que jamás me perdonaría.

Hoy actuaría distinto
se los digo con nobleza,
frenaría mis instintos
para actuar con la cabeza.

Adrián Correa
07/07/2009

martes, 30 de junio de 2009

Tarde de invierno

En esta tarde de invierno
cuando el día se oscurece,
los pájaros buscan su nido
y el aguacero aparece.

Veo tras el cristal
suavemente empañado,
esas graciosas burbujas
en los charcos embarrados.

Me invade ese sentimiento
de pena y melancolía,
ya no me resulta extraño
es típico en estos días.

Las nubes pasan de prisa
como queriendo apurar,
a este tiempo implacable
y esta pena aliviar.

Por suerte siempre se cumple
que después de la tormenta,
llega la dulce calma
que a mi vida contenta.

Camino apartado

Todo esto ha sucedido
en un camino apartado,
no espero que me entiendan
pero mi vida ha cambiado.

Tras un serio desperfecto
me encontraba en el camino,
con mi auto averiado
y librado a mi destino.

El sol me abandonaba
y me cubrían las sombras,
la noche se deslizaba
como una oscura alfombra.

Después de unas cuantas horas
de esperar que alguien pasara,
perdía mis esperanzas
y el miedo me abrazaba.

En un momento de ira
golpeando sobre mi coche,
lance un grito de auxilio
estremeciendo a la noche.

En ese mismo momento
sentí terror y asombro,
por nunca haber esperado
su mano sobre mi hombro.

Me dijo, no te des vuelta
solo vengo a ayudarte,
si tu miras mi rostro
yo tendré que abandonarte.

Mi sangre se congeló
y mi corazón no latía,
solo sentía las piernas
que apenas me sostenían.

Me dijo con vos pausada
te cruzaste en mi camino,
yo solo quiero ayudarte
y encausar tu destino.

No temas amigo mío
no es fácil aceptar,
que en este camino perdido
alguien te quiera ayudar.

Se dirigió hacia mi auto
y con suma precisión,
hizo que este arrancara
capturando mi admiración.

Gracias buen hombre le dije
solo quiero agradecerte,
por haberme ayudado
de esta forma sorprendente.

No debes agradecerme
estoy pagando una pena,
por ser tan vil en mi vida
esta es mi triste condena.

Yo morí en este camino
y justo en ese instante,
mi alma fue condenada
a servir de vigilante.

Solo debería ayudar
a alguien que se quedara,
en este viejo camino
y seria liberada.

Treinta años han pasado
y nadie se ha detenido,
con su auto averiado
o aunque sea perdido.

Por eso te digo amigo
no debes agradecer,
mi alma será libre
antes del amanecer.

Solo un consejo te doy
no confíes en tu suerte,
se una buena persona
hasta que llegue tu muerte.

Sino te puede pasar
lo que a este hombre en pena,
que por ser tan engreído
su alma pagó la condena.

Al subir a mi auto
disfrutando del alba,
ya no sentía temor
me invadía una gran calma.

Esas ultimas palabras
en el momento de su partida,
repicaban en mi cabeza
cambiándome la vida.

Mundo de peluche

Siento toda la inocencia
que me brinda tu mirada,
no conoces de maldades
ni de vidas complicadas.

Tus manos de terciopelo
no han tocado el vil metal,
que causa tantos desvelos
por conseguir un capital.

Tu mundo es de peluches
con carita sonriente,
no imagina gobernantes
mintiendo a tanta gente.

Me encanta verte dormir
con tu carita de placer,
disfruta mucho tu mundo
no te apures en crecer.

Al besar tu frentecita
un secreto yo te dejo,
vive tu vida feliz
que el mundo no es tan complejo.


lunes, 29 de junio de 2009

Gotas de melancolía

Veo las gotas de lluvia
cargadas de dulces recuerdos,
posarse con melancolía
sobre la ventana del tiempo.

Tienen esa dulzura
de las tardes tranquilas,
conversando con mi padre
sobre cosas de la vida.

Resaltan el dulce brillo
de esos niños ansiosos,
esperando el fin de la lluvia
para jugar en los pozos.

Y al verlas deslizarse
suavemente por el vidrio,
se convierten en lagrimas
en busca de un fiel cariño.

Como me gustan las tardes
con estos grises tan tiernos,
con esta suave llovizna
donde afloran los sentimientos.

lunes, 1 de junio de 2009

Dulce vientre


Como un regalo del cielo
veo tu vientre crecer,
tu piel es un terciopelo
esperando el amanecer.

Te ves tan dulce y radiante
que ya puedo imaginar,
a ese bello diamante
que pronto me has de entregar.

Nueve meses compartidos
esperando con paciencia,
disfrutando sus latidos
y gozando su inocencia.

Pronto llegara el día
que como un pétalo en flor,
sentirá nuestra alegría
el fruto de nuestro amor.

Adrián Correa
01/06/2009

viernes, 29 de mayo de 2009

Espacios vacíos.

Son los espacios vacíos
difíciles de llenar,
cuando nos deja un amor
comenzamos a extrañar.

Vació queda el entorno
donde fuimos tan felices,
todo parece distinto
no son los mismos matices.

Vacíos quedan los días
son mas largos y tediosos,
ya nunca volverán
nuestros momentos hermosos.

Vacía queda la cama
donde la pasión fluía,
inmenso es mi desconsuelo
al verla triste y tan fría.

Vació esta mi pecho
y llenarlo no consigo,
pues se que mi corazón
se fue muy lejos contigo.

Adrián Correa
29/05/2009

El hada enamorada


En un mundo de ensueño
una imagen celestial,
la más linda de las hadas
se baña en el manantial.

Los sauces la contemplaban
sentada sobre la roca,
con sus cantos adornaban
el esplendor de sus ropas.

Sus cabellos finos hilos
de un brillo encantado,
y su mirada tan dulce
como un beso regalado.

Pero tras esta belleza
ella algo ocultaba,
su corazón no tenía
el amor que añoraba.

Sus lágrimas parecían
ser como finos cristales,
que por su cara caían
creando los manantiales.

Su amado se fue lejos
buscando a los dragones,
que con sus lenguas de fuego
azotan las poblaciones.

Muy triste ella se siente
porque el podría morir,
y si esto sucediera
ella no podría vivir.

Pero un día el cielo
brilló en su gran entorno,
pues su amado regresó
montando su unicornio.

Fundidos en un abrazo
y besos apasionados,
sintieron sus corazones
latiendo entrelazados.

Adrian Correa
12/12/2008

Amor arrepentido

Siento el profundo dolor
que me dejaste grabado,
tras esta infame traición
que mi vida ha truncado.

He perdido mi princesa
que tanto me ha amado,
por seguir este impulso
de joven arrebatado.

Ahora no se que hacer
por mas que uso mi razón,
no encuentro el camino
de vuelta a tu corazón.

Me siento arrepentido
y hoy acepto mi pesar,
un error he cometido
no volveré a tropezar.

Deseo que mis palabras
llegaran a tus oídos,
te esperare por siempre
¡Tu amor arrepentido!


Adrian Correa
09/12/2008

Amor ciego

Dicen que el amor es ciego
y eso lo he comprobado,
al pensar y darme cuenta
de todo lo que te he entregado.

Te di mis sueños, mis anhelos,
mis años de juventud,
mi esfuerzo y solo esperaba
un poco de gratitud.

Todo de mi has recibido
y al principio no importaba,
con el tiempo me di cuenta
de cuanta indiferencia me dabas.

Ahora que ya no siento
lo que tú nunca apreciaste,
cumplo en decirte de frente
el tiempo que desperdiciaste.

No era mucho lo que esperaba
solo amor y comprensión,
pero nunca recibí nada
ahora entiendo mi desazón.

Otra vida he comenzado
y tú ya no estas en ella,
por el amor ser tan ciego
no podrás seguir mis huellas.

Adrian Correa
21/11/2008

Amor frustrado

Te soñé de mil maneras
de mil maneras te vi,
fuiste mi gran quimera
hasta que te conocí.

Toda vestida de blanco
con tus cabellos de oro,
y al desplegar tus encantos
yo mucho más me enamoro.

No me canso de mirarte
tú brillas como una estrella,
siempre quise conquistarte
eres la mujer más bella.

Pero el amor es muy cruel
nunca lo dijo en mis sueños,
que al encontrar a esa mujer
ella ya tendría dueño.

Adrian Correa
01/12/2008

Carta de un niño


Mi madre me ha dado
un lápiz y un papel,
para escribir una carta
al famoso Papa Noel.

Me dijo es un hombre
muy bueno y bondadoso,
ya comenzare a escribirle
pues estoy muy ansioso.

Empezare por pedir
las cosa que más quiero,
son tantas que pienso
cual pediré primero.

Señor yo le pido
que no haya más guerras,
no quiero ver más muertes
en vano sobre la tierra.

El hambre en el mundo
ya no quiero ver,
los niños felices
tendrán que comer.

Los chicos de la calle
tendrán un hogar,
colmado de risas,
juguetes y pan.

No quiero ancianos
sin ningún cariño,
a cada uno déle
el beso de un niño.

Tendrá que igualar
la gran diferencia,
de ricos y pobres
con su experiencia.


Nuestros gobernantes
tendrán que pensar,
en solo a su pueblo
hacer prosperar.

En los noticieros
no quiero escuchar,
toda esa tristeza
que nos suelen dar.

Haznos sentirnos
a todos hermanos,
y unidos los pueblos
tomarnos las manos.

Llena esta tierra
de prosperidad,
y que todo sea
amor y bondad.

Se que mis pedidos
te pueden dar risa,
pero es lo que todos
realmente precisan.

Por ultimo te pido
para mi y mi hermanito,
una bicicleta
y un triciclo bonito.

No importa si todo
no me puedes dar,
por la bicicleta
yo puedo esperar.

Adrián Correa
24/11/2008

Charla con la muerte


Esto sucedió un día
tras una caída tramposa,
solo sentí el dolor
y el frió de la baldosa.

Vi pasar a aquella sombra
eso no me lo esperaba,
mi cuerpo se estremeció
sabia de quien se trataba.

Ya no sentía dolor
el miedo me paralizaba.
Cuatro golpes en la puerta
y ella que se asomaba.

Toda vestida de negro
con su cara tapada,
no se veían sus pies
su aspecto aterrorizaba.

Mi sangre se congelo
al sentir que ella me hablaba.
- Vengo a llevarte conmigo
tu hora esta señalada.

Sentí en ese momento
que mi cuerpo no pesaba.
De esto se trata morir
no es como lo imaginaba.


- Oye muerte quiero hablarte,
dije con voz temblorosa.
- no te atrasare mucho,

será una corta prosa.

- No me creo tan malo
ni merecedor de esto,
mis hijos me necesitan
y como ellos el resto.

- Yo no soy quien decide
cumplo órdenes supremas,
solo las ejecuto
de las formas mas extremas.

Solo un favor te pido
no me lleves de repente,
si esto tú me concedes
te haré un valioso presente.

- Nunca nadie me cuestiona
ni se anima a dialogar,
tu me estas cayendo en gracia
creo que voy a escuchar.

- Simplemente te regalo
algo que tú no conoces,
la sonrisa de 2 niños
sus miradas y sus voces.


- No es necesario el presente
aunque me sienta tentada,
tu hora ya ha pasado
y mi decisión cambiada.

Solo la vi alejarse
sin decirme más palabras,
sentía otra vez dolor
mi cuerpo otra vez pesaba.

Al poder abrir los ojos
una imagen me abrumaba,
eran mis hijos gritando
que otra vez yo respiraba.

Mas no salgo de mi asombro
cuando riendo y gritando,
saludaban a esa sombra
que lento se iba alejando.

Adrian Correa
17/10/2008

Corazón sincero

Hoy tengo ganas de gritar
lo que siento en este instante,
y a tu corazón llegar
como un príncipe galopante.

Toda mi vida eres tú
y de mi alma la dueña,
controlas mi actitud
contigo este hombre sueña.

Quisiera que me escucharas
y que tu corazón abrieras,
que conmigo tú soñaras
y como tu hombre me vieras.

Si mi corazón sintieras
sabrías que soy sincero,
el te pediría que me quieras
y que por tu amor yo espero.

Adrian Correa
22/12/2008

Dios se equivoco

Mi poema es muy triste
pero quería explicar
como Dios siendo sabio
se puede equivocar.

Me premio con un regalo
nueve meses demoro,
pero al llegar seria
lo que nadie imagino.

Era el niño más bello
con su piel de fina seda,
con la mano toco mi dedo
como si ya me quisiera.

La luna cerró los ojos
es sol se oscureció,
cuando el doctor me dijo
su hijito recién falleció.

En mi cuerpo no entraba
ni una gota más de dolor,
todo eran llanto, lágrimas
y la sensación de estupor.

Una respuesta quería
nadie me la podía dar,
al salir vi una iglesia
y quise a Dios increpar.

Al entrar fui de prisa
directo hacia el altar,
no quería intermediarios
solo con Dios conversar.

Pero el estaba ocupado
y no me pudo atender,
al mirar hacia un costado
comencé a comprender.


Los ángeles me miraban
con su carita inocente,
salí con paso tranquilo
me sentía diferente.

Hoy entiendo el porque
de lo que a mi me paso,
por estar Dios ocupado
de regalo se equivoco.

Al darse cuenta de eso
lo tuvo que regresar,
me había mandado un ángel
que en la tierra no podía quedar.


Adrian Correa
02/12/2008

Donde estabas

Dónde estabas cuando nací,
que tus manos tibias no sentí.

Dónde estabas cuando enfermé,
que remedios de tu mano no tomé.

Dónde estabas cuando jugaba,
que la pelota no me tirabas.

Dónde estabas cuando fui abanderado,
que no estabas orgulloso a mi lado.

Dónde estabas al graduarme,
que extrañe tu calor al abrazarme.

Dónde estabas cuando me casé,
que otro padrino yo besé.

Dónde estabas cuando tu nieto nació,
que el reflejo de tus lágrimas nunca vio.

Dónde estabas cuando mamá falleció,
que ella de ti nunca se despidió.

Dónde estás en este momento
no te guardo ningún rencor,
sueño con ese encuentro
para ti sería un simple favor.

No quiero terminar mi vida
sin llegar a conocerte,
o que llegue tu partida
y angustiarme por no verte.

Sólo tengo una inquietud
y apelo a tu razón,
si aunque sea en tu juventud
has tenido corazón.

Adrian Correa
08/01/2009

El aire que respiro

El aire que yo respiro
me lo brinda tu simpatía,
y mi corazón late fuerte
al ritmo de tu alegría.

Mis días pasan felices
porque a mi lado tu estas,
tus palabras suaves olas
que me llenan de paz.

Pero algo me preocupa
si podré retribuirte,
todo el amor y el cariño
que tú siempre me ofreciste.

Tu bondad es inmensa
hace que yo nunca dude,
que tú siempre me aceptaste
con mis defectos y virtudes.

Yo no soy el mejor hombre
ni tampoco creo serlo,
tu corazón me entregaste
y nunca quiero perderlo.

Mi amor por ti es muy grande
y te entrego yo mi vida,
solo pido que me acompañes
por el resto de mis días.

Adrian Correa
25/11/2008

El hombre solitario

Mi vida es muy solitaria
y no porque yo lo quisiera,
la suerte fue mi contraria
y no conseguí compañera.

Mi niñez controvertida
me hizo un ser solitario,
de adolescente no tenía
amistades en mi vecindario.

Cuando el amor me llamó
no supe comportarme,
mi novia se retiró
y eso me llevó a aislarme.

Hoy ya soy un hombre viejo
y se me hizo familiar,
el mirarme en el espejo
y conmigo platicar.

Se que soy algo grotesco
cascarrabias y malhumorado,
quizás esto lo merezco
por mi mundo haber creado.

Adrian Correa
30/12/2008

La bestia en mí

Despierto de un sueño
me siento algo extraño,
comienza de nuevo
corro para el baño.

Abro la ventana
y veo esa esfera,
es la luna llena
ya se que me espera.

Siento mi sangre
muy fuerte correr,
y los pelos del cuerpo
comienzan a crecer.

Observo mi figura
ya todo ha cambiado,
ya soy una bestia
el dolor ha cesado.

No puedo pensar
me guía el instinto,
los sentidos agudos
ya todo es distinto.

Y salgo a la calle
ya debe comenzar,
la feroz cacería
que me ha de saciar.

Busco en callejones,
túneles y puentes,
a esos indefensos
que llaman indigentes.

Ya tengo en la mira
mi presa marcada,
solo falta ahora
darle la estocada.

Muy agazapado
y sin hacer ruido,
salte a su cuello
sentí su gemido.

Su sangre corría
con total libertad,
mi hambre saciaba
con mucha ansiedad.

el festín se detuvo
a medio servir,
porque el alba puntual
comenzaba a surgir.

Corrí a mi casa
otra vez al baño,
a borrar las huellas
de este rito extraño.

Me mire al espejo
y de nuevo veía,
a ese hombre bueno
al que todos querían.

Este es mi secreto
y es una advertencia,
con la luna llena
sentirán mi presencia.

Adrian Correa
116/12/2008



Labios apenados

Mis labios apenados
no sentirán tu besar,
mis ojos desesperados
no te podrán encontrar.

Tu piel con su frescura
mis manos no tocaran,
tu voz y tu dulzura
en mis recuerdos estarán.

Solo queda en mi pecho
esta frágil sensación,
no te tendré en mi lecho
ya debo entrar en razón.

Lo nuestro fue un suspiro
que el viento se ha llevado,
hoy tu recuerdo respiro
se que en mi pecho has quedado.

Mi corazón esta triste
no te ha podido olvidar,
tendrás siempre su cariño
si desearas regresar..

Adrián Correa
27/12/08




Mal de ciudad

Aun no se como expresar
de lo profundo del alma,
este tenaz sentimiento
que va torturando mi calma.

No se si será el asfalto
o tal vez esta gran ciudad,
por mas que pruebo e intento
no encuentro mi identidad.

Tanta gente, humo, luces
y ese barullo incesante,
hacen que mi día sea
una tortura constante.

Mi cuerpo ya me lo pide
y mi alma me presiona,
esta vida sin respiro
no es para mi persona.

La vida te va llevando
con una supuesta ilusión,
y al razonar te das cuenta
que has de tomar el timón.

Y se presentan los miedos
con las dudas asociadas,
si dar un cambio tan brusco
será una idea acertada.

Dicen que el hombre es libre
de acciones y pensamiento,
el corazón y el alma dicen
que este es un buen momento.

Lo que planeo es simple
no hay que hilar muy profundo,
ver a mi familia feliz
y encontrar mi lugar en el mundo.

Adrian Correa
11/11/2008

Poema para la muerte

En una tarde cualquiera
buscando mi inspiración,
no pensé que ese fuera
el día de su aparición.

Justo frente a mi sentada
con su temible presencia,
sabía lo que me esperaba
una terrible experiencia.

No pronunciaba palabras
sus ojos no tenían vida,
vestida de perfecto luto
yo presentí mi partida.

Sus dos primeras frases
llegaron a congelarme,
con voz ronca y pausada
comenzaría a explicarme.

Un hombre al acompañarme
de un poeta me ha hablado,
que con sus letras despierta
los sentidos más guardados.

Debes escribir un poema
alguna emoción provocar,
si no puedes complacerme
me tendrás que acompañar.

Mi mente quedo en blanco
por un segundo morí,
tras surgir de mis cenizas
este poema le ofrecí.

Muerte, tu eres traicionera.
Muerte, tu causas dolor.
Muerte, no sabes de justicia.
Muerte, te pido un favor.


No te lleves gente sana.
No regales desazón.
No dejes niños sin padres.
No traiciones su ilusión.

Todos en su pecho tienen
algo que llaman corazón,
aunque tú nunca lo sientas
sabes que tengo razón.

Lo leyó atentamente
su respirar no escuchaba,
provocaría mi asombro
cuando una lágrima brotaba.

Me habló con voz cortada
no imaginan ésta parte,
gracias poeta me dijo
otro día vendré a buscarte.

Adrian Correa
29/11/2008



Querida traicionera

Escribo este poema
pues no te puedo enfrentar,
mis lágrimas brotarían
como las olas del mar.

Siempre fuimos un equipo
al que todos podían ver,
tuvimos duros rivales
ninguno nos pudo vencer.

Cuando las vidas juntamos
nuestro sueño fue el de ver,
a nuestros hijos criados
y muy juntos envejecer.

Esa imagen se borro
y de eso nada queda,
como la hoja de papel
dormida en la hoguera.

En que momento pudiste
pensar que yo no sabría,
de tu falta tan infame
hecha con alevosía.

En tan solo unas horas
mis oídos expectantes,
supieron de tal pecado
que tenías un amante.

Por eso es que no quiero
mirarte ya a los ojos,
porque en ellos vería
sus cuerpos llenos de gozo.

Hoy me queda tu recuerdo
de la vida como era,
sintiéndote solo mía
mi querida traicionera.

Adrian Correa
11/12/2008

Sed de sangre

Como todos los días
al ocultarse el sol,
se asoma la luna
cumpliendo su rol.

Comienza la hora
de mi despertar,
de entre las sombras
mi sutil merodear.

Soy un caballero
muy amable y gentil,
que lleva escondida
la esencia más vil.

Busco en sucios bares
suburbios y tabernas,
esas victimas dulces
de muy lindas piernas.

Mi encanto despliego
llegando a atraerlas,
y después del juego
al fin poseerlas.

Esa noche fue
la dama más bella,
cayó en mi trampa
y partí con ella.

No fuimos muy lejos
al llegar al callejón,
surgió la lujuria
detrás de un cajón.

Ese fue su regalo
pero el mío sería,
la sangre fresca
que en ella corría.


Clave mis colmillos
en su cuello perfumado,
sintiendo la energía
del líquido tan preciado.

Su cuerpo sin vida
quedo en el callejón,
mi marca en su cuello
detrás del cajón.

Culminaba la noche
y con prisa regresaba,
a ese féretro oscuro
que mi secreto guardaba.

Adrian Correa
17/12/2008

Si pudiera elegir

Me duele el solo pensar
que primero tú te fueras,
no soportaría el dolor
que de mi te despidieras.

Mis días serian noches
y mis sueños un pesar,
al no tener más tus besos
o al no poderte abrazar.

Tu mirada, tu sonrisa,
todo eso extrañaría
tu bondad, tu simpatía,
no se si lo resistiría.

En mi pecho no entraría
ni un gramo más de dolor,
solo estaría tu ausencia
me faltaría tu calor.

No se si será el asar
o eso que llaman suerte,
que nadie puede elegir
el momento de su muerte.

Si yo tuviera ese don
o si de mi dependiera,
partiría yo primero
mi querida compañera.

Te esperaría en el cielo
y a los ángeles contaría,
de esa hermosa mujer
que me alegraba la vida.

Adrian Correa
15/11/2008


Este es un poema que habla de esas cosas que uno no quiere que pasen pero que son inevitables.
Hay acontecimientos que uno sabe que nos van a hacer sufrir, pero por ese motivo tenemos que aferrarnos a la vida y vivir cada día como si fuera el último. Y hacerles saber de una u otra manera a las personas que queremos, todo lo que sentimos por ellas, justo en el momento de sentirlo.
porque puede suceder que cuando nos decidamos, si esperamos el momento justo.
Ya sea demasiado tarde.

Solo un instante

Las olas mojándome los pies y la brisa acariciando mis mejillas,
me hicieron sentir la libertad, del sol amable cuando brilla.
Las gaviotas volaban saludando al cangrejo cerca de la orilla,
y una roca inmóvil pero viva, jugaba con la arena a hurtadillas.

Sentí la plenitud del horizonte y el ruido de las nubes al moverse,
las hojas de los árboles miraban, como el viento comenzaba a adormecerse.
Sentí toda la paz que anhelaba y el tiempo comenzó a detenerse,
ese momento que yo tanto deseaba, comenzó esa tarde a aparecerse.

Como siempre en la vida sucede, no dura mucho lo bueno,
debía aprovechar ese instante, poniendo mis sentidos a pleno.
Los sonidos endulzaron mis oídos, con mis manos acaricie el terreno,
sentí el gusto y el olor de las olas y mis ojos te recorrieron sin freno.

Comprendí en ese momento que mi vida tenía sentido,
tan solo por ese pequeño minuto, yo merecía estar vivo.
Hoy sigo con mi rutina de trabajo y mucho atavió,
pero me queda el recuerdo, de ese instante que fue mío.

Adrian Correa
09/12/2008

Te espero

Al mirar el cielo azul
solo puedo recordar,
ese brillo de tus ojos
que me hacia suspirar.

en los pájaros, tu risa
recrean con su cantar,
no saben que son culpables
de mi corazón lastimar.

Juntos con la soledad
recorremos mi camino,
nos hicimos inseparables
por el maldito destino.

Nunca paso por mi mente
que esto sucedería,
tú partirías primero
y yo solo quedaría.

En la tierra no hay consuelo
te lo digo con razón,
a ti te habia entregado
toda mi carga de amor.

Tan solo espero ese día
y es mi profundo anhelo,
que tú vengas a buscarme
para pasear hasta el cielo.

Adrian Correa
25/11/2008

Tentación diabólica

Justo frente a mi cama
apareció su figura,
un hombre que me miraba
con la seriedad mas cruda.

creí haberlo soñado
pero al escuchar su voz,
mi cuerpo quedo temblando
con este relato atroz.

Me llaman Diablo, no temas
yo no te voy a lastimar,
y solo quiero que sepas
que hoy vamos a negociar.

Si quieres fama, fortuna
yo todo te podría dar,
pero sin duda alguna
un alma haz de señalar.

No tiene que ser amigo
ni tampoco un familiar,
elige cualquier mendigo
con eso me ha de bastar.

Oyeme Diablo le dije
tu nunca me harás fallar,
por mas que el oro brille
mi alma no has de comprar.

Eres tonto en no querer
mi gran trato aceptar,
porque tu hermano recién
te acaba de señalar

Adrian Correa
01/12/2008

Tiempo travieso

Dicen que el tiempo es justo
pero en eso se equivocan,
les puede dar un gran susto
si su justeza provocan.

Cuando estas entretenido
veras la velocidad que tiene,
pero al estar aburrido
parece que se detiene.

Es totalmente porfiado
y nunca caso te hará,
por más que estés apurado
el nunca se apurara.

Y si el tiempo te falta
y le pides que se detenga,
pondrá su velocidad mas alta
sin que nada lo entretenga.

En mi caso he aprendido
que le debo agradecer,
al cambiar mi tiempo perdido
por tiempo de escribir y aprender.

Adrian Correa
28/12/2008